En Colombia no fue su difícil topografía la que impidió el desarrollo de su red ferroviaria, pues a mediados del siglo XX ya había una línea de Bogotá a Santa Marta y sólo faltaba atravesar la Cordillera Central para tener otra completa hasta Buenaventura. Fueron los propietarios de camiones y buses y los sindicatos del ferrocarril los que acabaron con los trenes. Y la idea errónea de que eran un sistema "obsoleto" que sería reemplazado por automóvil es, y aviones que aquí volaban por encima de las cordilleras. Pero como en este país casi todo llega tarde, solo se acabó con ellos varias décadas después, justo cuando en Europa y luego en Estados Unidos tomaban un nuevo aire. El país se quedó sin trenes y sin suficientes carreteras, y su nuevo despegue ha sido imposible como se acaba de comprobar con l