Ir al contenido principal

Pasado imperfecto. 12.11.2016


    Desde las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki en 1945, son varias las veces que se ha estado al borde de un desastre nuclear, como lo señala Noam Chomsky (¿Quién domina el mundo?, 2016, pp. 285 a 295), el que cada vez está más cerca y que cada vez sería peor: el Apocalipsis lo llama Chomsky. Y mientras tanto el trastorno climático, como propone que se lo nombre el arquitecto Harold Martínez, sigue avanzando cada vez más hacia un desastre climático.

     Por otra parte Estados Unidos es el único país que ha utilizado armas atómicas, mas el peligro es que ya no es el único que las tiene, pues se le sumaron la Unión Soviética (ahora Rusia), Francia, el Reino Unido y China, los denominados Países Nucleares, y además hay otros estados poseedores de armas nucleares como India, Pakistán, Corea del Norte y muy probablemente Israel, o con las tecnologías necesarias para obtenerlas como Irán, e incluso Brasil ha intentado construir una bomba atómica.
                                                                                                                                                                        Como es lo natural en la historia de la humanidad, es un futuro causado por un pasado inmediato dominado por Estados Unidos desde que salió triunfador en la Segunda Guerra Mundial. Gobernando siempre a partir de unos principios y valores centrados en proteger su sector empresarial, incluyendo el de las armas y el de los automóviles, tan vinculadas aquellas a la guerra y estos al trastorno climático, pues business is business y time is money. Pero que igualmente produce gentes valerosas como Noam Chomsky.

    Un pasado que coincide con la aceleración del crecimiento demográfico en el planeta y por ende de las ciudades en él, y en consecuencia las más amenazadas en el futuro inmediato pues en ellas está concentrada más de la mitad de los habitantes del mundo. Tanto, que como bien lo dice José Rodríguez Castro ante su acelerado crecimiento en todas partes cabe preguntar si el concepto continuara vigente pues sus funciones se han modificado o sustituido, escapando al escrutinio académico (www.ref.pemex.com/octanaje/27fut.htm).

   Las ciudades son las primeras víctimas del fundamentalismo, el terrorismo y las guerras actuales, como nos muestran todos los días en el caso de la del Oriente Medio, con Alepo cada vez más destruida, la que contaba con cerca de 2.132.100 habitantes, es decir un poco menos que Cali. A lo que se suman los grandes monumentos de la humanidad igualmente destruidos y que la inútil ONU solo se contenta con calificarlos como “actos de guerra” (http://www.codigonuevo.com/19-preciosos-monumentos-destruidos-por-la-guerra/).

   A la pregunta de Chomsky “¿qué principios y valores gobiernan el mundo?”  (p. 318) Hilary Clinton ya contestó: mantendría los actuales acuerdos comerciales para incentivar una economía global, es decir, para lo mismo que propone Trump: la hegemonía de Estados Unidos. De hecho los TLC, tan del interés del gobierno colombiano y de ciertos empresarios para el “desarrollo” de las ciudades, son, como muchos productos del campo, a favor de Estados Unidos.

   Y la realidad es que aquí ya se comenzaron a traer estrellas internacionales de la arquitectura, o ni siquiera, ya sin muchos encargos debido a la “burbuja inmobiliaria” pasando por alto que si hay algo que no se deba globalizar es la arquitectura, la que en primer lugar se debe a los diferentes climas, paisajes y tradiciones, tan bienvenidos en un pasado idílico pero cuyo futuro está cada vez más amenazado, no quedando más que pasar el día; CARPE DIEM decía Horacio (Odas, I, 11).

Comentarios

Entradas populares de este blog

Ciudad, Alcaldía y Concejo 13.08.2022

  Cali, como tantas ciudades en el mundo, afronta amenazas, entre ellas el cambio climático, la posibilidad de una recesión económica global, pandemias, e inmigraciones no deseadas; además de posibles disturbios internos, sobrepoblación creciente y el precario control sobre su área metropolitana irresponsablemente aún no oficializada. Asuntos todos los anteriores en los que en Cali, sus alcaldes, concejales, ciudadanos e instituciones juegan un papel definitivo, pero que ya a inicios de la tercera década del siglo XXI lamentablemente lo hacen cada uno por su lado ignorando, consciente o inconscientemente, las otras opiniones y propuestas en lugar de buscar que sean compatibles. Respecto a la Alcaldía de Cali, hay que recordar que esta debería ser responsable de actualizar el Plan de Ordenamiento Territorial de la ciudad, POT, y de llevar a cabo los acuerdos del Concejo Municipal en ese sentido, sin perjuicio de sus propias potestades; y que debe ser consciente de que es la máxima autor

La nueva arquitectura. 27.08.2016

        Lo urgente de lo sostenible deberá lograr que la arquitectura de nuevo sea bella y eficiente como fue la edilicia de siempre en todas partes. Los nuevos profesionales, formados en las universidades deberán buscar que las técnicas apropiadas para una arquitectura sostenible los lleven a nuevas formas coherentes, en lugar de inventárselas caprichosamente como en la arquitectura espectáculo, o falsamente ecológicas como en mucha de la vendida como “verde”. Para principiar, lo construido debe durar mucho y ser fácilmente adaptable a nuevas distribuciones y usos, como también para su mantenimiento, remodelación a fondo, o el reciclaje final de sus materiales si es del caso. Y su construcción, uso y mantenimiento debe consumir el mínimo de agua y energía y generar el mínimo de contaminación, sobrantes, escombros y desperdicios. El ejemplo a seguir es desde luego la arquitectura tradicional, tan bien adaptada a su clima, paisaje y tradiciones, que hay que reinterpretar con

De urbe a utopía 17.09.2022

  Urbes son aquellas ciudades muy populosas, como es el caso de Cali, que ya va para tres millones de habitantes en su área metropolitana aún no oficializada, pero igualmente se las relaciona con las capitales, o con las ciudades más importantes y educadas del mundo, lo que no es el caso de Cali. Sin embargo, el que no sea una urbe no debe implicar para nada el que se descuide tanto su urbanización, se desconozca tanto el urbanismo y la arquitectura, ni que sus habitantes carezcan de urbanidad, todo lo cual lleva a la pertinencia de su utopía como urbe futura para mejorar la ciudad actual retomando lo mejor de su pasado cuando era una pequeña villa colonial al lado de un río. Urbanización es la acción y efecto de urbanizar, y cuyo resultado final es un núcleo residencial supuestamente urbanizado; lo que no es el caso de Cali, en la que varios de sus sectores periféricos son loteos y construcciones ilegales o directamente invasiones espontáneas, o instalaciones industriales o comerciale