Ir al contenido principal

Un mejor clima. 14.07.2011

    Una buena ciudad se debe acomodar bien a su clima y sus paisajes, y sus edificios deben ser sostenibles, ecoeficientes y poco contaminantes: así son los puebles y barrios más bellos. Lo que es muy fácil en el trópico templado, como es el caso de Cali, para lo cual lo más indicado es retomar críticamente sus tradiciones urbano arquitectónicas pertinentes. Actualizarlas y mejorarlas pero no copiarlas, preocupados más por lo que se buscaba que por la imagen de las formas con que se lograba. Y lo que se buscaba antes con respecto al clima era confort y protección de lo construido, lo que de contera suministraba los ambientes entrañables de íntimos patios, corredores sombreados, recintos con escasos vanos pero enfrentados y grandes techumbres protectoras que alejaban el sol y el agua de las fachadas de los volúmenes.

      Además de volver a los patios y en lo posible a los corredores, es imperativo permitir la circulación cruzada del aire a través de los diferentes recintos, y lograr cerramientos y cubiertas con suficiente aislamiento térmico, a partir de componentes que de nuevo usen la tierra como material de construcción. La teja de barro sigue siendo muy apropiada, ya se fabrican industrialmente y se pueden asentar sobre mortero impermeabilizado y no sobre tierra, como en la época colonial, obteniendo más aislamiento que solo al ponerla sobre guías de caña o madera como se pasó a hacerlo en la región hace muchas décadas. Pero por supuesto también se puede experimentar con otros materiales pero lo que es ineludible es la gran cubierta protectora que da sombra a las fachadas.
         
     Igual de sostenible, ecoeficiente y poco contaminante debe ser el transporte, público y privado, en una buena ciudad, el que comienza con sus diferentes habitantes apenas cierran la puerta de su vivienda y termina cuando abren la del sitio de su destino. Una buena ciudad debe contar con trenes de cercanías que la conecten con las ciudades y poblaciones vecinas. Más un sistema integrado de transporte colectivo que incluya metro, buses y taxis, además de carros y bicicletas de alquiler, que faciliten la movilización dentro de la ciudad, haciendo innecesario el uso permanente del carro particular, los que deberían ser más pequeños y eficientes, que quedarán para las noches y los fines de semana. Y por supuesto las motos, que hoy en día son las mayores causantes de accidentes, deberían ser prioritariamente para el deporte y la recreación.

      Por lo tanto una buena ciudad debe ser concentrada y con buenos andenes y muchos parques, pero sin edificios innecesariamente altos. Es perfectamente posible obtener densidades suficientemente altas con edificios de mediana altura. Es imprescindible considerar que después de los cinco  pisos se pierde el contacto con la calle y que solo hasta allí es posible subir sin ascensor, y que además los bomberos no alcanzan con sus escaleras más allá del noveno piso, por lo que la vivienda debería estar limitada a un máximo de siete pisos. Que por lo demás es más o menos la altura de las ciudades europeas, en las que se puede comprobar que con sus paramentos corridos es su altura mediana lo que les da su innegable belleza a sus calles y su confort en el verano. Y aquí estamos en un verano permanente pero muy controlable.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El (des) Gobierno Municipal. 21.05.2016

         El desordenado proceso del control del patrimonio construido en la ciudad, y en realidad de todo lo que se construye o destruye en Cali, lamentablemente suena a la vieja canción: songo le dio a borondongo, borondongo le dio a bernabé, bernabé le pego a muchilanga, le hechó a burundanga y le hincha los pies. Es el futuro cantado de San Antonio, el triste pasado del Centro de Cali, el escandaloso caso allí del Hotel Aristi, y el sainete del Colegio de La Sagrada Familia, frente al parque del barrio El Peñón.                                                                                                                                 ...

Soñar Políticas para la Polis. 07.12.2013

   El descontrolado incremento demográfico mundial lleva   cada vez más gente a vivir en las ciudades. Y su rapidez aquí, un buen negocio para empresarios, terratenientes y contratistas, significó más delincuencia y   accidentes de tránsito, la demolición del patrimonio cultural (memoria colectiva) y   la construcción de edificios espectáculo (que no espectaculares) e inseguros, y el despilfarro de energía y agua potable. Es el caso de los tres millones de Cali, que nadie quiere contar.                                                                                 ...

La nueva arquitectura. 27.08.2016

        Lo urgente de lo sostenible deberá lograr que la arquitectura de nuevo sea bella y eficiente como fue la edilicia de siempre en todas partes. Los nuevos profesionales, formados en las universidades deberán buscar que las técnicas apropiadas para una arquitectura sostenible los lleven a nuevas formas coherentes, en lugar de inventárselas caprichosamente como en la arquitectura espectáculo, o falsamente ecológicas como en mucha de la vendida como “verde”. Para principiar, lo construido debe durar mucho y ser fácilmente adaptable a nuevas distribuciones y usos, como también para su mantenimiento, remodelación a fondo, o el reciclaje final de sus materiales si es del caso. Y su construcción, uso y mantenimiento debe consumir el mínimo de agua y energía y generar el mínimo de contaminación, sobrantes, escombros y desperdicios. El ejemplo a seguir es desde luego la arquitectura tradicional, tan bien adaptada a su clima, paisaje y tradiciones, que hay qu...